De nueva cuenta la Universidad Autónoma de Nuevo León se ha posicionado como una de las instituciones educativas líderes en México en materia de propiedad industrial.
Lo anterior, gracias a la cultura de la innovación y protección de las invenciones que se ha tenido en la Máxima Casa de Estudios.
Sus números lo demuestran, pues a la fecha la UANL ha solicitado el registro de 624 invenciones ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), de las cuales 437 han sido otorgadas.
En el marco del Día del Inventor Mexicano, el Rector Santos Guzmán López reconoce la labor de los científicos que, con su trabajo, impulsan la innovación y competitividad al interior de la Universidad y fuera de ella.
"Celebro con orgullo el ingenio que cada uno de nuestros inventores e inventoras aporta a nuestra comunidad. Su creatividad, dedicación y esfuerzo son testimonios valiosos de la riqueza del talento que caracteriza a nuestra región, dejando en claro que cada invención es un paso hacia adelante en la construcción de un futuro mejor para todos. Felicidades a cada uno de ustedes por su valioso aporte y por hacer de nuestra Universidad un semillero de excelencia", externó el ejecutivo universitario.
De los 437 títulos de invenciones con los que cuenta la UANL al 2024, 194 son patentes en las áreas de biotecnología, química, mecánica, farmacéutica y eléctrica, así como 76 modelos de utilidad y 167 diseños industriales cuya aplicación se dirige a la ingeniería. cuidado de la salud, industria mueblera y utensilios para el hogar.
INCREMENTO DE REGISTROS Y PATENTES
La institucionalización del Premio UANL a la Invención en 2014 fue un incentivo que contribuyó al incremento de registros y patentes otorgados al trabajo científico de los universitarios.
Fue así que en 2018 la Universidad, a través del Centro de Incubación de Empresas y Transferencia de Tecnología, lanzó la primera versión del Portafolio de Tecnologías como una estrategia para identificar a qué sector industrial podría interesar una patente determinada o un paquete tecnológico, y así escalar productos o servicios generados al interior de la institución en beneficio de la sociedad.
"Cuando tienes una institución que te respalda, como en este caso la Autónoma de Nuevo León, es menos complicado el proceso de patentar y es más fácil enfocarte en sacar la innovación en tu laboratorio", aseguró Rubén Morones Ramírez, científico destacado por sus estudios en aplicaciones antibacterianas de nanopartículas para potenciar los efectos de antibióticos que cuentan con tres patentes otorgadas por el IMPI.
"Mi consejo es tratar de siempre pensar en la innovación, en tratar de hacer algo de forma distinta. Siempre tener una mente de inventor, de decir: 'yo lo voy a hacer distinto'. Obviamente analizándolo antes; analizas y propones y eventualmente las patentes van a llegar", agregó.
Las estrategias y políticas de impulso al Centro de Patentamiento fueron clave para el fortalecimiento en este tema, ya que la Universidad se vio envuelta en un ecosistema industrial donde se cosechó el liderazgo en patentes.
Estos avances, a su vez, permitieron incrementar los posgrados, la infraestructura en ciencia, los grados de doctor, las publicaciones y el número de investigadores adscritos al Sistema Nacional de Investigadores.
"Yo pienso que no es proteger lo que uno hace, sino darle el valor que debe tener lo que tú haces para que en algún momento dado llegue a las personas. Yo como científica me siento emocionada de saber que, por ejemplo, de estas invenciones hay productos que se están vendiendo y que llegan al consumidor", señaló por su parte María Julissa Ek Ramos, pionera en el estudio de los microorganismos endófitos y su aplicación en cultivos para el manejo de plagas que cuenta con dos solicitudes de patente y un proyecto de transferencia de tecnología.