Compañía Nacional de Danza cierra el año con su clásico "Cascanueces

Desde que Mariaud entró a la Compañía, en 2017, ha participado en El Cascanueces.

CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 22 (EL UNIVERSAL).- Para Valeria Mariaud, primera bailarina de la Compañía Nacional de Danza (CND), escuchar la música que Tchaikovsky hizo para "El Cascanueces" le trae buenos recuerdos que la remiten, de inmediato, a la Navidad, las reuniones con la familia y la gente que ama. No sólo relaciona uno de los ballets más amados por el público con el baile, sino con el amor, la familia y la oportunidad de compartir.
En este montaje, que se presenta en el Auditorio Nacional desde 2001 y que ha consolidado un público cautivo, Mariaud interpreta el rol del Hada de Azúcar, un personaje que le da la oportunidad de entrar al mundo de la fantasía a Clara, y la guía _no sólo a ella, sino al público- a vivir, aunque sea sólo un segundo, en ese sitio mágico: "Pueden disfrutar y ver las danzas, convertirse en niños o niñas para experimentar esa fantasía. Eso es lo que me gusta al hablar de ese rol, creo que es lo que tiene el Hada de azúcar", señala.
Desde que Mariaud entró a la Compañía, en 2017, ha participado en El Cascanueces, aunque al Hada de Azúcar la interpreta desde hace cuatro o cinco años, cuenta.
Año con año, "'El Cascanueces' ya se ha convertido en una tradición familiar. Llevamos muchos años presentándolo en diciembre en el Auditorio Nacional. Es una obra muy familiar, muy navideña, parte de la temporada del año. Tiene una esencia mágica, puesto que todos crecimos con ese cuento y con la música tan emblemática de Tchaikovsky.
Abunda en que es una obra bella y familiar, que puede servir como un excelente primer acercamiento al mundo de la danza para los más pequeños: "Cada año, nosotros como bailarines queremos mejorar, queremos seguir creciendo y exigiéndonos técnicamente en lo que podamos mejorar, en cuestiones interpretativas y técnicas, para que la gente disfrute y se lleve a un gran espectáculo". Cuenta que la primera función, que fue el pasado 18 de diciembre, tuvo una buena recepción del público. "Cada vez también lo que pasa es que existe nuevo público, nuevas personas que van a ver la obra". Además de que ha habido pequeños cambios coreográficos (los arreglos a la coreografía de Nina Novak son de la CND), en esta versión participan estudiantes de la Academia de la Danza Mexicana y de la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea. "Cada año hay nuevos bailarines más jóvenes estrenando roles. Eso también crea cierta magia". La Orquesta del Teatro de Bellas Artes interpreta la música. Las funciones son hoy y mañana al mediodía y a las 18:00 horas en el Auditorio Nacional.