Madrid, España.-'Picasso maltratador', 'Picasso es Antonio David Flores' o 'Picasso la sombra de Dora Maar'. Con estas leyendas estampadas en camisetas, un grupo de estudiantes de la Escuela Massana acudió el jueves pasado a las salas del Museo Picasso de Barcelona para, en sus propias palabras, “denunciar la falta de conciencia política por parte del museo con el hecho de que Picasso fuera un maltratador”.
La acción, parte de trabajo de fin de curso de la clase de Arte y Feminismo que imparte la artista valenciana María Llopis en la escuela barcelonesa, buscaba denunciar hasta qué punto «Picasso interpretó el papel de Barba Azul fagocitando la potencia creativa de cada una de ellas», en relación a las mujeres del artista malagueño.
«Fuimos al Museo Picasso, donde nos trataron fatal, por cierto, para visitar sus salas vistiendo las camisetas que podéis ver en en las imágenes», escribió Llopis en su cuenta de Instagram.
La 'performance', con escaso eco más allá de las redes sociales, es el primer paso de un proyecto que, anuncia Llopis, pasa por comisariar una exposición sobre la arte artística y también sobre «el maltrato sufrido de todas las artistas que estuvieron con Picasso».