Como cada trimestre,  el  instituto Nacional de Estadística y Geografía, INEGI, publicó su Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana y los resultados ya son de todos conocidos: crece la percepción de inseguridad 1.6 por ciento durante el último trimestre del 2019.

La gente, dice la encuesta, sigue cambiando sus hábitos para promover su autocuidado, como  no portar cosas de valor, caminar de noche en los alrededores de la vivienda, el no permitir que los menores salgan de noche o visitar parientes y amigos.

Y aunque la gente le sigue teniendo fe a la Marina, el Ejército y Policía Federal, le sigue poniendo sus “peros” a las policías estatales y municipales.

El resultado coincide con lo que permanentemente señalan las autoridades de Derechos Humanos, que emite recomendaciones constantes a las policías locales.

De la policía estatal, el resultado de INEGI sigue concordando con otros sondeos privados que arrojan que Nuevo León es de los más inseguros de México. Nada bueno hasta ahora aunque su gobernador y los mandatarios estatales vecinos sostengan que los trabajos conjuntos sí han dado resultados positivos.

La encuesta del INEGI también arroja resultados sobre la efectividad de los gobiernos municipales en temas de baches, alumbrado, transporte, parques y jardines, recolección de basura, mercados municipales y rastros.

Por lo que respecta a los baches, se trata del rey de los problemas que marca la encuesta del INEGI, con el 82 por ciento y prácticamente no hay ciudad donde los ciudadanos se salven de ellos, impactando en los tiempos de traslados, generando más contaminación, quema de combustible y hasta estrés.

Por lo que respecta a Nuevo León,  el municipio de Escobedo cierra de manera excelente el año ya que a nivel nacional es de los mejores posicionados en la percepción de la gente que ve a su alcaldesa como una persona que sabe resolver los problemas municipales.

En honor a la verdad, la mayoría de los municipios metropolitanos de Nuevo León pueden rendir buenas cuentas a sus gobernados o al menos así por perciben: Apodaca (49.4 por ciento);  San Pedro (48.7%); Santa Catarina (48.2%);  y San Nicolás (45.6%).

Guadalupe y Monterrey deberán seguir trabajando en las necesidades de la comunidad y muy particularmente en la cercanía con aquellos que alguna vez les dieron su confianza, ya que apenas el 38.4 por ciento y 21.7 por ciento, respectivamente, ven a sus alcaldes ocupados en lo que se ocupa en las colonias para su seguridad y bienestar.

En el tema de corrupción, es en Guadalupe donde el 57.1 por ciento de la población dice haber sido víctima de algún acto de este tipo, seguido de Apodaca, con del 46.3 por ciento.

El año 2020 es muy importante para los partidos políticos y todos aquellos con deseos de postularse rumbo al 2021 pues del trabajo que realicen sus gobernantes se irá definiendo la tendencia y preferencia de los ciudadanos que cada vez están más cansados de no ser escuchados ni tomados en cuenta en las decisiones de gobierno.

Así que si por ahora algunos ediles han hecho sus berrinches porque los resultados de la encuesta no  les parece apegada a la realidad y acusan a los medios de la percepción ciudadana, no les queda de otra más que seguir haciendo trabajo de tierra, recordando que “santo que no es visto no es adorado” ¿o no?