banner edicion impresa

Opinión Columna


Tambores de guerra; arde el mundo


Publicación:12-01-2020
version androidversion iphone

++--

Qué lástima que en nuestro “mundo real” sólo tengamos una vida y también un solo planeta, que nos lo estamos acabando.

El fin de semana pasado teníamos una pequeña discusión familiar, la cual era originada por el dilema sobre qué película ver Star Wars o Jumanji; mi hijo mayor Iker y yo nos inclinábamos por la primera opción, mientras que Isa, la madre, y el hermano menor, Gabriel, resultaron triunfadores al apoyar la segunda opción. La película gira en torno a un videojuego en el que se involucran adolescentes quienes intentan salvar al mundo de Jumanji de una guerra, la cual pone en peligro la naturaleza de ese mundo.

Esto me recordó lo que está pasando en “el mundo real”, al ver los videos de cómo unos misiles lanzados por parte del gobierno de Estados Unidos atacan un convoy de camionetas donde iba el poderoso y popular general iraní Qasem Soleimani; para mala fortuna, creo que con el ruido de esta explosión también se escucharon los tambores de guerra

Lo que ves en los videos citados es una especie de videojuego; las imágenes son de disparos a unas camionetas que iban por un camino y nunca vimos a las personas que mataron, sólo se veía algo como una especie de rayos, los cuales caían sobre su objetivo; se supone que fueron disparados unos misiles por drones, es decir, alguien sí estaba en otra parte del mundo con una computadora, jugando en una especie de videojuego de guerra, un Jumanji real.

Esta era de tecnología, de realidad virtual, de redes sociales, misma que viven nuestro hijos, que juegan nuestros pequeños, es aprovechada por las grandes potencias para matar de verdad, para destruir y mostrar su poder, aunque lo anterior implique la posibilidad de desatar una guerra.

Mientras eso pasa en Medio Oriente, en otra parte del mundo, en el hemisferio sur, arde una parte de Australia o quizás del mundo, porque los incendios han devastado seis millones de hectáreas en seis estados de ese país y más de mil millones de animales que estaban en ese hábitat han muerto, el mundo arde.

Me pregunto por qué esa tecnología de drones no pueden cargar miles de litros de agua para ayudar a apagar incendios o por qué no existen satélites que de inmediato detecten un fuego y eviten su propagación, o simplemente ayuden a detectar dónde se resguardan la mayoría de los animales para salvarlos; es decir, que las tecnologías también estén al servicio de la naturaleza de nuestro mundo.

Cuando terminamos de ver la película Iker y Gabriel seguían con la emoción la cual, más que por la misma película, era por el juego; como a otros niños les encantan los videojuegos, les pregunté qué parte de la película les había gustado más y ambos coincidieron en que les fascinó cómo pueden matar a los protagonistas, sin embargo, regresan pues el Jumanji les da tres vidas…

Qué lástima que en nuestro “mundo real” sólo tengamos una vida y también un solo planeta, que nos lo estamos acabando. La tragedia que vive Australia con los incendios no es sólo de ellos, del hemisferio sur, es de todos nosotros y mientras los norteamericanos y los iraníes sigan jugando a mandar misiles para explotar aviones, camionetas y asesinar personas, en un descuido apretarán el botón nuclear equivocado y no habrá Jumanji que nos salve.

 



« Redacción »