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Opinión Columna


Ferias del Cohete


Publicación:27-12-2019
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Es cierto que gracias a las autoridades municipales que no tenían de dos sopas, si es que no querían pagar factura electoral, pero la cancelación de las Ferias del Cohete tuvo su lado amable.

Sobre todo cuando se evitó con la quema de pirotecnia en muchos de los casos, comparado con años anteriores donde la evidencia del mal uso de cohetes se patentó por todos lados en Nuevo León.

Y, aunque con ello se evitó la emisión de contaminantes al medio ambiente, sin que esto quiera decir que la entidad haya bajado en sus niveles, de una u otra clase, al fin todas dañan.

Vale meterle lupa al asunto, si circulan menos camiones, si hubo muchas carnes asadas o las empresas soltaron sus emisiones, al fin si en días normales no revisan, menos en estas fechas.

Aunque cuerpos de socorro y las áreas de urgencias, de por sí saturadas en los hospitales locales, fueron menos las asistencias que se brindaron por la quema de cohetes, pero falta fin de año.

Amén de los reportes registrados de incendios, que no tuvieron nada que ver con los cohetes según informes preliminares y que en otras ocasiones, era factor determinante año con año.
Y, con eso de que la venta sigue sin freno por Internet en la calle y hasta en la feria del cohete en Zuazua, no se podrá echar las campanas al vuelo, habrá que ver cómo terminamos año.

Al que habrá de seguirle la huella es nada más y nada menos que al ahora ex funcionario del gabinete de Andrés Manuel López Obrador, Waldo Fernández.

Sobre todo, cuando el político de carrera y empresario se ha distinguido por mantener una carrera limpia y sin escándalos que se le conozcan hasta ahora.

Y, que de acuerdo a quienes dicen que saben de cuestiones políticas, no está peleado con nadie de su clase, por lo que le da mucho de ventaja.

Por lo que sin lugar a dudas, podrá figurar en las boletas electorales del 2021 sino pa'l baile vamos, tras prestar además sus servicios al gobierno Bronco.

Y, que según los propios ''espías'', empezando el 2020 arreciará sus actividades promocionales en busca de la gubernatura de Nuevo León.

Peeero como no nos gusta el chisme, hasta ahí la dejamos, salvo su mejor opinión toda vez que sigue cargando pilas por lo que viene.

Donde las aguas siguen en tensa calma es al interior del PRI que comanda Pedro Pablo Treviño Villarreal.

Especialmente, porque en el juego de las sillas no todos encontrarán la candidatura deseada porque sobrarán gallos.

Sin embargo, hay mucho nerviosismo porque a pesar de las promociones de unidad, hay quienes hacen para su santo.

Lo que traducido en otras palabras se podría señalar, como renuncias ya anunciadas al tricolor para darle guerra.

De modo que, no le extrañe si de la noche a la mañana se encuentra con suspirantes tricolores que cambian de marca.

Y, todo porque no podrán encontrar lugar por la gubernatura de Nuevo León, la cual quieren más de dos, damas y caballeros.


El que se puede decir que anda más que culeco, pero no piense mal, es el ex funcionario federal de la Profeco, José Guadalupe Aguirre, ahora titular de Comercio de Guadalupe.

Lo anterior porque en la fiesta navideña que le organizó a su tropa, echó la casa por la ventana, pero aparejado a ello contó con madrina de lujo, pues la alcaldesa Cristina Díaz les acompañó en la fiesta.

Aunque en las últimas elecciones no le ha ido del todo bien, el ex legislador panista, Arturo Benavides no ha dejado de moverse picando piedra.

Por lo que habrá que seguirle el paso, sobre todo ahora que no deja de pisar la base, haciendo contacto con quienes le han brindado su apoyo.

Apareciendo de esa manera en redes sociales tocando puertas, en convivios de algunos sectores en Guadalupe y hasta embarrando masa para los tamales.
Lo que no se sabe es qué cargo buscará en esta ocasión luego de que renunciara a su partido inicial y por cuáles colores competirá.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 



« Redacción »