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Opinión Columna


La casilla única rumbo a 2021


Publicación:03-05-2019
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La elección de 2021, independientemente de quienes participen en la contienda, debe ser la oportunidad para definir si la casilla única es o no funcional

 

Entre los múltiples objetivos que persiguió la Reforma Político Electoral aprobada en 2014, ubicamos entre otros, la de mejorar la calidad de las elecciones, tanto en el ámbito federal como local; generar mayor certidumbre a los procesos electorales y, consecuentemente, establecer los esquemas que permitieran la equidad en la competencia electoral.


En este sentido, fue creado un nuevo sistema electoral y, con ello converge el INE como autoridad electoral nacional cuya principal función ha sido organizar las elecciones federales, pero también se le dieron diversas atribuciones en el ámbito local, destacando la de convertirse de facto, en una instancia supervisora de la función electoral en las entidades federativas, para lo cual, basándose tanto en las atribuciones consagradas constitucionalmente como en las establecidas en una nueva legislación electoral federal, ha coordinado diversos esquemas de operación electoral.


Es así, como uno de los rubros que hoy queremos poner sobre la mesa, es la funcionalidad del modelo de casilla única, instrumentada en las elecciones federales de 2015 y 2018 y que, a su vez, impacta diversos procesos que giran en torno a una casilla electoral como lo son, por ejemplo, la documentación y materiales electorales sobre todo tratándose de elecciones concurrentes (federal y local), el equipamiento de las mismas, la integración y distribución de los paquetes electorales, sus mecanismos de recolección, así como el proceso de capacitación y supervisión de dichas casillas y, consecuentemente la operatividad del flujo de información que instancias electorales emiten a la opinión pública, como el avance en la instalación de casillas, posibles incidentes, los conteos rápidos con estimaciones de los resultados electorales, entre otros.


Sin embargo, el modelo no ha estado exento de imponderables que, con toda oportunidad, podrían mejorarse rumbo al proceso electoral 2020-2021.
Entre los rubros que consideramos necesarios de revisión por parte del INE como de los organismos públicos locales electorales respectivos, se destacan las siguientes:


1. La normativa, criterios o lineamientos que determinen la instrumentación del modelo de casilla única, deben considerar las circunstancias locales respectivas.


2. Para la correcta aplicabilidad de las directrices que el INE establece a través de su Consejo General, se debe cuidar, en éste y otros tantos temas, que no exista un importante desfase entre la aprobación de sus acuerdos y su publicación en el Diario Oficial de la Federación.


3. Toda vez que en elecciones concurrentes no sólo participan las autoridades electorales federales y locales, sino también las representaciones partidistas de dichas instancias, los recorridos para la ubicación de casillas, deben seguirse haciendo de forma coordinada y con la mayor participación posible de las instancias participantes; esto genera certidumbre en los espacios en donde la población asistirá a emitir su sufragio.


4. Con el objetivo de contar con información oportuna, valdría la pena, revisar, a la luz del último proceso electoral, los mecanismos de recolección y traslado de paquetes electorales.


5. Sobre los sistemas de información sobre el desarrollo de la jornada electoral, no estaría demás que el INE revisara algunos sistemas locales como el del Instituto Electoral de la Ciudad de México que bien pudiera servir de modelo nacional.


6. Sería importante que el INE, en coordinación con institutos electorales locales, exploren generar un ahorro en la instalación de la casilla única, toda vez que ese fue uno de los objetivos de su instrumentación.


Cualquiera que sea la planificación que las autoridades electorales determinen para el modelo de casilla única, deben tener en cuenta que su principal función es que tengan toda la infraestructura, espacio y características posibles, acorde a la ley, para recibir la votación de los electores.


La elección de 2021, independientemente de quienes participen en la contienda, debe ser la oportunidad para definir si la casilla única es o no un modelo funcional en la operación electoral. ¡Hasta la próxima!

@fdodiaznaranjo


diaznaranjo.fernando@gmail.com



« Redacción »
Fernando Díaz Naranjo


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