Quién sabe cómo se vayan a poner las cosas, pero ante el desencanto de lo prometido, el gobernador Jaime Rodríguez Calderón dijo que negociará recursos para Nuevo León.

Lo anterior, luego de que en eso de los dineros, en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador no se incluyeran los recursos para los proyectos contemplados para la entidad.

Por lo que vale ver y esperar en qué consistirán las negociaciones, toda vez que en el pasado El Bronco hasta advirtió la posibilidad de retener las aportaciones a la federación, por ejemplo.

Y, que ya montado en su macho, el ejecutivo de Nuevo León ya traía la escopeta al hombro la vez que los gobernadores se juntaron con AMLO y que se los toreó con promesas.

Por lo que habrá de agarrar asiento lugar y tabla, porque algunas cosas se quedarán encampanadas con los raquíticos recursos proyectados para diversas cuestiones.

El que de plano anda más que encorajinado y con ganas de mandar todo al carajo es nada más y nada menos que el ex alcalde de San Pedro, Mauricio Fernández Garza.

Con eso de que desde que salió de su gobierno, Miguel Treviño lo ha traído a pan y agua, el ex primer rudo sampetrino por lo que se ve, está dispuesto a poner los puntos sobre las ‘’íes’’.

Y, que en el mejor de los casos, se ha dado a la tarea de aclarar a los cuatro vientos la mayoría de las dudas que o han traído comprometido, ante presuntas irregularidades que cometió.

Para empezar ahí tiene que ayer mismo, aprovechando los micrófonos, divulgó una carta compromiso que firmó junto con Miguel Treviño desde hace meses sobre el tema.

Por lo que descartó el asunto sea nuevo y se haya aprobado vía fast track o exprés como dice la raza, pues tenía desde mediados del 2017 con más de 30 discusiones del asunto en Cabildo.

Que en lo que a él y su familia compete, señala que no tendrán beneficio y que las piezas destinadas para los museos, serían dadas en comodato a 30 años para evitar su robo.

Sobre todo, porque las mismas, señaló son parte de una colección familiar y que cuestan una fortuna, por lo que no se donan a municipio, como una forma de proteger su posesión.

Al tiempo de reiterar, que no hay sobre costo en el proyecto de los museos, que se le sumaron mal las cosas y que en el mejor de los casos, falte lo que falta, él lo pondrá de su bolsa.

El que de plano, de la noche a la mañana se volvió el funcionario más querido, más popular, vaya el que todo mundo esperaba en Monterrey es nada más y nada menos que Bernardo González.

Resulta que poco antes de llevar el tema de una aportación adicional, que luego el presidente concejero se negara a calificar como bono, Bernardo se juntó con la burocracia sindical.

Que acompañado por todos los concejeros en primerísima fila, el presidente concejero prometió llevar el tema al cabildo de Monterrey para su aprobación, por lo que se ganó las palmas.

Sobre todo, cuando el funcionario dejó un buen sabor de boca a quienes lo escucharon, especialmente a las damas, que como dice la raza terminaron por ponerle casa.

Y, es que en su mensaje, Bernardo les hizo ver parte de su trayectoria como ex procurador y labor al frente de Fuerza Civil, donde dijo cuidó con el corazón a sus elementos policiacos.
Y, que de esa misma forma haría lo mismo con los empleados municipales, de quienes dijo, se les ha castigado mucho, por eso el ‘’bono’’ extra de compensación para estas fechas decembrinas.
Así que ya sabrá cómo se alborotó la gallera con el visitante, quien efectivamente llevó el tema al cabildo para su aprobación, aunque la concejera Liliana Benavides, no quedó muy conforme.
Pero como Liliana es de esas damas que les gusta dar guerra, ahora en su calidad de síndico concejera, habrá que ver si deja pasar la rola o utiliza pintura de guerra en la cara.

…

Aunque la hicieron de emoción, los legisladores locales terminaron por aprobar el plaqueo de los vehículos conocidos como RZR.

Aunque en el tema el reglamento vial de los municipios es más que claro, los diputados como si no tuvieran pendientes le dieron largas.

Y, todo para que, para finalmente terminar por darle visto el plaqueo de las unidades. Vaya quien tiene un RZR tiene para eso y más.