banner edicion impresa

Opinión Columna


"Esto es un crimen, no accidente"


Publicación:18-10-2018
version androidversion iphone

++--

“Esto es un crimen, no accidente”; con tales palabras se refirió un familiar de una de las ocho personas que murieron en el derrumbe de una Plaza Comercial


“Esto es un crimen, no accidente”; con tales palabras se refirió un familiar de una de las ocho personas que murieron en el derrumbe de una Plaza Comercial en la Colonia Espacio Cumbres, Municipio de Monterrey; con irregularidades graves que deberá aclarar la autoridad correspondiente se llevó a cabo la mentada construcción que colapsó y dejó evidencia de la ferocidad con las que algunas constructoras trabajan para ganar más dinero a costa de la seguridad de las personas que el día de mañana habitaran ahí; materiales inadecuados de baja calidad y una negligente supervisión de la autoridad municipal se conjuntaron y la obra malnacida generó una tragedia mayúscula que mancha seriamente la credibilidad de unos y otros, porque a reserva de profundizar y encontrar a los culpables, la Administración de Monterrey se ensucia nuevamente con un saldo de muertos y heridos que no se puede resolver de manera alguna, pues la vida no tiene precio, y aunque terminen con la indeminación correspondiente, el Municipio y la constructora no terminaran nunca de pagar el daño ocasionado.


Cero y van tres tragedias en la Administración Municipal de Monterrey con ésta que es la más grave; ya sucedió con el socavón de la Avenida los Ángeles ocurrida en el mes de septiembre del año pasado donde falleció una mujer madre de familia; igualmente perdió la vida un matrimonio por el derrumbe de la construcción de la Torre Vía, misma que provocó la caída de cuatro casas en el Fraccionamiento Antigua, en el mes de noviembre del año pasado; y ahora la mayor de las tres tragedias que entristecen y causa gran irritación porque todo apunta en estos tres casos a negligencia y corrupción como causas primarias de lo sucedido y al menos en los primeros dos casos no hay persona alguna detenida y sancionada; veremos que cause sigue la tercera; por lo pronto, la construcción no tenía el permiso correspondiente y fue suspendida por la Administración de Monterey once meses atrás; situación que le valió un cacahuate a los dueños de la constructora, amén de la negligencia de la autoridad municipal para supervisar y hacerse muy probablemente de la vista gorda para dejar que siguiera la misma con materiales que incluso no eran los óptimos para generar seguridad… increíble; ahí es donde nace la nefasta corrupción que habrá que probar, aunque huela a estiércol.


Tristes palabras de los dueños de la construcción al aparecer y buscar un arreglo anticipado en lugar de asumir toda su responsabilidad al construir tan deficientemente para ganarse unos pesos más y dar en principio el pésame a los familiares de los que murieron; más tristes aun las palabras de la autoridad en boca de varios funcionarios que en principio debieron ir al sitio de la tragedia y asumir empatía con los afectados además de definir que investigaran a fondo lo ocurrido para sancionar a los responsables e indemnizar conforme a Ley, pero no, al contrario, se defiende toda la ralea al mencionar que actuaron bien y que no hubo falla alguna; desde siempre es conocida la práctica de retrasar obras de particulares con objeto de cobrar moches por parte de la autoridad e incluso hacerse de la vista gorda a cambio de apoyos futuros que serán cobrados con este tipo de prácticas donde impera la falta de supervisión y el otorgamiento de permisos para iniciar a operar una vez terminada la obra como posiblemente sucedió en esta tragedia última; llevará el caso la Fiscalía Anticorrupción sin Vicefiscal exhibido por sus nexos con al actual Alcalde; hacemos votos para que lleguen a fondo y haya un castigo ejemplar que de algo sirva a la sociedad y en algo mitigue el inmenso dolor causado a las familias de las víctimas… ¿le gustaría opinar?


renerdzgdo@yahoo.com.mx

 



« Redacción »


Publicaciones del autor