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Opinión Columna


Y dicen que delitos van a la baja...


Publicación:24-09-2018
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Ayer, con la novedad de lo que debería ser una fiesta terminó en tragedia. Integrantes de las porras de Tigres y Rayados volvieron a dar la mala nota.
La violencia estalló entre la mejor afición del país en vísperas de la celebración del Clásico futbolero de la Sultana del Norte, con resultados fatales.
Los daños hasta en cierta forma podrían ser lo menos, pero llegar a la violencia con armas punzocortantes, piedras y toda clase de objetos afectó la fiesta.
El No a la Violencia en los estadios volvió a resonar, sin que esto hubiera servido para borrar el lunar que ahora distinguirá lo que se vivió ante tal encuentro.

Las cámaras de seguridad y los celulares por lo visto fueron una gran herramienta para captar y difundir la violencia registrada ayer ante la celebración del Clásico Tigres-Rayados.
De ahí que las famosas redes sociales se calentaron de tal manera con imágenes y videos que circularon a tal grado que saturaron las famosas redes sociales.
Por lo que de una u otra forma las autoridades tendrán a la mano, los elementos necesarios para investigar lo sucedido y en su momento aplicar sanciones.
Sobre todo por aquello de que no se puede tolerar que la violencia se desborde ante acontecimientos de esta naturaleza.

Ya salió el peine y no es que nos guste el chisme, pero las autoridades locales según sus números la incidencia delictiva va a la baja.
Es más, hay quienes advierten que los delitos van en franca caída por las acciones de los cuerpos policiacos y su coordinación.
Desde luego no se puede negar el darles el beneficio de la duda, sobre todo, cuando acciones coordinadas deben ser bien valoradas.
Sin embargo hay le va el chal. Resulta que hay corporaciones policiacas, no vamos a decir nombres que emplean sus propios métodos.
Sucede que para no tener gritos ni regaños de los jefes, los policías han encontrado la manera de taparle el ojo al macho.
Que con eso de que ellos son el primer filtro, en ocasiones no pasan el reporte más arriba y se guardan toda acción.
Y desde luego, aparejado a ello, aplican medidas correctivas para “espantar” al delincuente común y no afecte su zona.
Pero esto no quiere decir que la incidencia delictiva vaya a la baja, sino que los reportes no se hagan de manera correcta.
Por lo que habrá de meterle lupa al asunto, para no seguir viviendo en la Isla de la Fantasía y con delincuentes en la calle.

Por cierto y ya que andamos con cuestiones relacionadas con la inseguridad y el tema de las tarifas, los taxistas dejan mucho que desear.
Las buenas intenciones de ciertas autoridades por “ayudarlos” en la autorización de las nuevas tarifas podrían quedar muy mal como gestores.
Pero eso no es todo, si se toma en cuenta que taxistas siguen tomando las calles y aplicando la ley de la selva, sin que nadie les meta freno.
Que la implementación de los números y marcas de control podrían dejar también muy mal paradas que implementaron su aplicación.
Sobre todo en el entendido de que dichos sellos o marcas, servirían para establecer un férreo control de quienes manejan los taxis.
Sin embargo, y a pesar de las buenas intenciones, la verdad de las cosas es, que no ha servido de mucho o mejor dicho de nada.
No pasan días en que se capten imágenes de taxis que son utilizados para delinquir, ya sean de los verdes o de los blancos.
Por lo que tal vez sea hora de llamar a cuentas a los principales promotores de dichas marcas y adelantarles las vacaciones.
En especial, cuando se anunció dicho programa con bombo y platillo, con la promesa de tener un servicio controlado y de calidad.

 



« Redacción »