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Opinión Columna


INE: trama perversa


Publicación:26-07-2018
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La propia resolución reconoce no haber probado que el fideicomiso usara financiamiento público, ni que los recursos fueran utilizados con fines electorales

 

El Consejo General del INE multó a Morena con 197 millones de pesos por el fideicomiso creado para apoyar a los damnificados del sismo de 2017. Previo a la elección, medios filtraron que el consejero Murayama, redactor de la Resolución, afirmó: "la queja —del PRI— se presentó por un probable desvío de recursos de financiamiento público para gastos de campaña —afirmando— revisamos la contabilidad del partido y de su financiamiento público —constató— no ingresó dinero al fideicomiso, fue de origen privado". El 17 de julio, Horacio Duarte, representante de Morena ante el INE, explicó: "el Fideicomiso es instrumento privado; cada apoyo a damnificado está documentado por un registro individual, foto del inmueble dañado, identificación oficial del beneficiario y recibo; todo a disposición del INE, SAT y PGR". Ratificó: "falso que se hayan destinado recursos a las campañas de Morena". Denunció la aprobación de una Resolución que supone que el fideicomiso es parte de Morena, induciendo que los recursos para los beneficiarios fueron empleados para sus actividades partidistas. Sin embargo, diez de once consejeros aprobaron la Resolución, filtrada semanas antes de ser votada. Duarte denunció la presión de consejeros del INE, particularmente de Baños, para votarla antes de las elecciones, sin conseguirlo. El consejero Ruiz Saldaña, único que votó contra la "resolución", cuestionó al INE por filtrar la resolución —vulnerando el debido proceso—; no citar a los implicados; ni allegarse de la información. "Sancionó —el INE— a Morena sin una investigación exhaustiva, sin preguntar a los damnificados… si recibieron el dinero del fideicomiso, ni demostrar que se condicionara hacia el voto; lo que rutinariamente está obligado a hacer el INE".


La propia resolución reconoce no haber probado que el fideicomiso usara financiamiento público, ni que los recursos fueran utilizados con fines electorales, declarando infundada la queja original del PRI, por lo que ahí debía haber concluido la indagación; en todo caso, si vieron irregularidades, dar paso a las instancias facultadas. ¡No lo hicieron! La Resolución del INE produjo lo que obviamente pretendieron, una campaña de desprestigio contra Morena; "no pretendieron investigar sino armar una acusación" (dijo Pedro Miguel, presidente del fideicomiso), en medios nacionales, presentando fotos, palabras, emulando narraciones sobre crimen organizado: "acción concatenada, orquestada, coordinada"; sembró la idea que es equiparable al Pemexgate, a los Amigos de Fox. Comentaristas orquestados difundieron: "primer acto de corrupción de Morena… es igual a todos". AMLO señaló: "el INE, Hacienda, la Comisión Nacional Bancaria tienen los documentos del fideicomiso y de los beneficiarios… 50 cajas con todos los respaldos… toda la información del banco; se hicieron auditorías a la cuenta". Incluso el conocido operador del PRI, el consejero Baños, teniendo todas las pruebas a la mano, dejó viva la sospecha: "el destino final —de los recursos— no podemos determinarlo". Representó la esencia del INE, producto de la repartición de consejeros entre PRI, PAN y PRD. Baños se mantiene enquistado como consejero desde 2008, sobrevivió a la desaparición del IFE. El Consejo del naciente INE es producto de dicha rebatinga entre diputados priistas, panistas y perredistas en 2014.


Morena impugnó el caso ante el Tribunal Electoral. Considerando los hechos, deberá revertir dicha resolución difamatoria. Ocho consejeros, tres ausentes en conferencia, leyeron un "pronunciamiento conjunto", reconocieron: "no se constató el uso electoral de los recursos involucrados". Pero negaron "sesgos políticos", intentando justificar su evidente trama para dañar moralmente. Fracasarán: la autoridad moral de AMLO, basada en su principal fortaleza, su honestidad, llevó a más de treinta millones de mexicanos a votar por el proyecto que encabeza.



« Redacción »
Manuel Bartlett Díaz


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