banner edicion impresa

Opinión Editorial


Carta a Rebeca


Publicación:26-02-2018
version androidversion iphone

++--

Mi familia llegó a radicar al casco de San Pedro a principios de los 70s. El barrio comenzaba a poblarse y créalo o no, una década después aún había calles sin pavimentar y cada temporada de lluvias debíamos hacer acrobacias para mantener el calzado libre de lodo.

En la Secundaria Federal Jesús M. Montemayor que sigue en pie por la calle Juárez había estudiantes agrupados en pandillas que a la menor provocación se enfrascaban en riñas campales y estos mismos jóvenes invadían las esquinas para molestar a los transeúntes, especialmente a las jovencitas.

Era un San Pedro inseguro y “sin chiste”, donde en pleno casco había vecindades feas y una buena dosis de lotes baldíos.

San Pedro era un municipio que salvo el periodo de Norma Zambrano, fue predominantemente priista.

Las cosas cambiaron en 1989 con la llegada de Mauricio Fernández Garza a la presidencia municipal de San Pedro y con el Partido Acción Nacional al frente, con buenos administradores, la fisonomía y el flujo de recursos han convertido a San Pedro en el municipio más rico de México y uno de los menos inseguros de Nuevo León.

Como en botica, ha habido gobernantes de todo tipo. Patanes como Gerardo Garza Sada, quien en aras de defender el derecho a la vida, dijo que  “La mujer violada ya está violada, el hecho de que aborte o no aborte no le quita lo violada, pobrecita…”.

Han desfilado en la alcaldía Rogelio Sada, Fernando Margáin, Tere García de Madero y Ugo Ruiz; Mauricio ha sido presidente municipal en tres ocasiones y aunque no comulgo con algunas de sus decisiones al frente del gobierno, reconozco que le ha dado a la ciudad una imagen cosmopolita.

A Fernández le debo agradecer que desde su primer periodo se dedicara a atender las carencias básicas del casco municipal como buenas vialidades y canalizar algunos arroyos donde había asentamientos humanos.

Seguro usted que me lee puede enriquecer este ejercicio editorial reseñando las cosas que no se han hecho bien, pero hablaré a título personal cuando opino que el gran defecto de Mauricio es el distanciamiento con el ciudadano.

Si la tendencia prevalece y Acción Nacional continúa al frente del gobierno municipal, yo quisiera, como vecina y ciudadana de esta gran ciudad, pedir a Rebeca Clouthier que trabaje para tender puentes de comunicación con aquellos a quienes se supone debe servir y así reivindicar al partido que la postula.

Alguna vez escuché decir a un político tricolor que “si el PRI llegara a gobernar de nuevo San Pedro, se notaría el cambio… para bien o para mal”.

Soy una convencida de que cambiar no necesariamente es bueno. Creo que el PAN aún tiene mucho por hacer en San Pedro pero los habitantes también necesitamos sentir cercanos a nuestro alcalde y su cabildo así como los legisladores que nos representan en el Congreso local, para que estén atentos a nuestras propuestas e inquietudes y también participar en las decisiones de gobierno.

Conozco a Rebeca desde mis tiempos de reportera y reconozco en ella a una persona de buena voluntad, heredera de una filosofía de amor y trabajo por el ciudadano. Espero, deseo y confío no estar equivocada.

Comentarios: nelly.cepedagzz@gmail.com

 



« Redacción »