Con fe lo imposible soñar
Al mal combatir sin temor
Triunfar sobre el miedo invencible
En pie soportar el dolor.

El orgullo regio, nos ha permitido mantener una identidad propia, que está determinada por usos y costumbres: El saludo franco, la mirada firme, la palabra dada como valor intrínseco, el trabajo arduo, el esfuerzo compartido, el comportamiento generoso para recibir y convivir con los amigos.

Los norteños hemos contribuido en mucho, para que este gran país que es México, conserve la “esperanza” en un mejor futuro, para ello, tenemos que superar adversidades, luchando con ahínco por disminuir las desigualdades, buscando brindar oportunidades a quienes nunca las han tenido.

Amor y cariño al terruño, como eje motivador de nuestras familias; centro de desarrollo industrial y comercial poseedor de un gran atractivo para quienes decidieron mudarse a vivir entre nosotros.

Soñar se convierte en una virtud, cuando te propones construir las bases necesarias para que se cristalice. Las ilusiones tienen que dejar de serlo para dar lugar a las acciones que contribuyan a transformar la realidad.

Por ello y, aunque nos critiquen continuaremos por el camino manchego enfrentando molinos de viento y luchando por “Alcanzar una estrella”, una que no sea Fugaz, que Ilumine con luz propia a todos a quienes rodea.

Los sueños son posibles si cuenta con una gran dosis de fe y esperanza; pero sobre todo si no se nos olvida compartirlo con los demás.

Y al igual que el ave Fénix que vivía en el Jardín del Paraíso y anidaba en un rosal, una vez más renaceremos de las cenizas, para continuar soñando, que un mundo mejor es posible.

El tiempo y la vida nos han enseñado a no temer a las consecuencias de nuestros actos y a no extrañar a quienes, producto de sus debilidades y egoísmos quedan en el camino.

A pesar del intenso fuego que pretende incinerar nuestras fortalezas seguiremos adelante, con quien se mantenga firme en Nuestros Ideales. El Destino y el Futuro son de los Grandes, no está hecho para los pusilánimes.

Somos producto del Diario del Che y el Plan de Ayala. Aprendemos de Nuestros Errores y al igual que un árbol recién podado creceremos aún más fortalecidos.

El crisol funde los metales a las más altas temperaturas, para darles forma y así tengan una utilidad concreta. La ciencia ha descubierto que para darles mayor dureza y resistencia es necesario alearlos con otros elementos; de tal manera que, si solos eran fuertes; unidos con otros lo son aún más.

Con los seres humanos ocurre lo mismo, aquellos que son forjados en las adversidades y superan las pruebas difíciles sobreviven, y aumentan sus fortalezas; los otros quedan en el camino y aunque buscan con quien juntarse no lo logran, porque carecen de principios afines, en un primer momento creen que son iguales y lo único que los caracteriza es la ambición y el deseo por el poder, por lo tanto no llegan lejos.

Hoy en día, no todos tenemos cultivado el valor de la amistad, para algunos solamente significa la oportunidad de aprovecharse del otro. Una oportunidad de relacionarse para obtener ventajas y beneficios de esta supuesta amistad; a pesar de ello, seguimos creyendo en la humanidad y en que la amistad debe valorarse, perseguirse, conquistarse, porque al igual que el amor es una necesidad humana, indispensable para llegar a la felicidad, no hay que perder la fe y la esperanza en los amigos, sigamos siendo solidarios.