Ave Lamia, el futuro de las publicaciones culturales

Ciudad de México.-Ave Lamia es una publicación mensual digital de diverso contenido literario que ha logrado sobrevivir siete años gracias a la pasión de José Luis Barrera Mora, quien ha sabido coordinar un equipo de trabajo con el que cada mes edita desde poesía, crónica, ficción y “todo lo que funcione”.

      La revista tuvo sus orígenes en abril de 2012; “hubo un proyecto fallido previo a la revista; edité un libro mío, Memorias dipsómanas, de una manera muy rudimentaria; curiosamente lo escribí sobrio”, mencionó irónico el editor de la revista electrónica en entrevista con Notimex.

      Expuso que después de aprender “lo que no se debe hacer para publicar”, decidió realizar una revista a propósito de un pasquín que publicaba un conocido suyo llamado Alejandro Parra; “un examigo que publicaba en Esto”, y fue entonces que se unió Luciano Pérez, “un extraordinario corrector que lo hace de maravilla”.

      Aunque su primera intención era realizar una publicación impresa, “yo era el único que trabajaba”, por lo que no había posibilidades de hacer una fuerte inversión. Es cuando entra Gabriel Rojas en la escena, “es el que tiene menos que ver con la cultura, pero sí la disfruta mucho; ha colaborado voluntariamente de manera muy interesante haciendo la página web. Digamos que, entre Luciano, Gabriel y yo hacemos la revista”, dijo, mientras come una galleta de las varias dispuestas para la charla.

      Aunque originalmente la revista se iba llamar Abrapalabra, Rojas le hizo saber que ese nombre ya tenía un dominio registrado en Internet. Luciano Pérez —un apasionado del paganismo germano, asegura José Luis— pensó en usar la palabra “lamia”, que la Real Academia Española define como “figura terrorífica de la mitología, con rostro de mujer hermosa y cuerpo de dragón”.

      "Pensó en 'La llorona', pero no como la pensamos nosotros, sino como una lamia; al final de cuentas 'La llorona' es una lamia. El nombre no me gustaba mucho porque podían confundirlo con una revista gótica; entonces, pensó en agregar el 'ave', como 'ave César' o 'ave María', una loa a la lamia.

Conseguir más lectores cautivos

Barrera Mora mencionó que uno de los principales retos que enfrenta la revista es la captación de lectores. “Difundimos la revista de una forma muy sencilla: la subo a una página de Facebook y pago unos 300 pesos para que se publicite. ¡Es muy sencillo eso!, pero sólo nos da algunos lectores fugaces, no cautivos. Lo que yo quisiera es que fueran personas que estuvieran esperando la nueva edición”.

      Con siete años a cuestas, indicó que una de las cosas que más le gratifica de editar Ave Lamia es la retroalimentación que recibe de las personas. “Hay veces que encuentro a gente que me dice: '¿a poco tú eres el de Ave Lamia?, ¡yo la leo!', y esa es la mayor satisfacción de un editor”, apuntó.

      Por otro lado, la publicación le ha permitido crecer como lector, aun sin leer libros. “He aprendido de muchos temas que desconocía. Como hoy en día mi labor ya es la de periodista cultural, pues llega un momento donde tienes que saber de autores y temas que nunca has leído”.

      Aunque la revista es mensual, “apenas da tiempo para investigar tantos temas; son muchos que nunca acabo, pero uno tiene que seguirse documentando; no sólo hay que indagar, también hay que releer autores, reescuchar música”.

      Actualmente Ave Lamia recibe un promedio de 800 visitas al mes, que van desde Europa, Estado Unidos y un poco de Sudamérica, y es por esta razón que para Barrera Mora una publicación por Internet tiene el mismo valor que una revista impresa.

      "Somos de la vieja guardia, y obvio que quisiéramos tener la revista física, pero es más por el amor a la letra impresa y por la generación en la que nos tocó crecer. Yo creo que hoy en día la revista en línea es el futuro, porque actualmente es más común ver celulares en las manos de la gente", concluyó.