Declara Panamá duelo a 30 años de la invasión de EUA

Panamá.- La presidencia de Panamá aprobó este miércoles declarar el 20 de diciembre de 2019 día de duelo nacional en conmemoración de la invasión estadunidense operada por el expresidente George H.W. Bush en 1989. 

“Durante 30 años la sociedad panameña ha esperado que se honren las vidas de quienes fallecieron o resultaron heridos durante la invasión a territorio panameño en 1989”, dio a conocer la presidencia.

Sin cierre obligatorio para dependencias gubernamentales u oficinas privadas, durante la conmemoración la bandera panameña ondeará a media asta en memoria de las víctimas de la operación militar estadunidense perpetrada para deponer al presidente Manuel Antonio Noriega, quien antes había sido colaborador de la inteligencia de EUA.

“A 30 años de la invasión, por primera vez en la historia el gobierno nacional reconoce declarar el 20 de diciembre día de duelo nacional para honrar a los panameños y todos los inocentes que perdieron su vida y defendieron la integridad de nuestro territorio”, señaló el actual mandatario, Nito Cortizo.

La determinación oficial se da un día después de que la periodista panameña Sol Lauría reportara en el diario El País que más de 600 documentos desclasificados por el gobierno de Estados Unidos pueden consultarse en el sitio Panamá Files (panamafiles.revistaconcolon.com).

Lo anterior es un trabajo conjunto del colectivo de periodistas Concolón, el Centro de Derechos Humanos de la Universidad de Washington y la Comisión 20 de diciembre de 1989.

“Hasta el momento son más de 600 documentos que van desde 1977 hasta 2011 y corresponden a informaciones de la Casa Blanca, los departamentos de Estado y Defensa, el Comando Sur y organismos como el National Security Council y la CIA, entre otros, que se publican este martes (17/12/19) en la plataforma Panamá Files”, indicó la reportera en el diario español.

“El proceso de desclasificación de archivos continúa con arreglo a lo dispuesto en (la) Ley de Libertad de Información estadunidense”, agregó.

El 15 de diciembre de 1989 Panamá, gobernada desde 1984 por el general Manuel Antonio Noriega, se declaró en guerra con Estados Unidos y el 20 de diciembre la administración de George Bush padre invadió el territorio para desmantelar a las Fuerzas de Defensa de Panamá, capturar al mandatario e imponer a otro, en una maniobra nombrada por Washington como "Operación Causa Justa".

El ataque implicó la participación de 27 mil soldados estadunidenses equipados con armamento de alta tecnología para descarrillar a Noriega, quien antes colaboró con la CIA y fue cómplice de Estados Unidos en tareas de contrainsurgencia en la región.

“Noriega comandaba uno de los ejércitos más pequeños del continente, las Fuerzas de Defensa de Panamá, que habían sido creadas con el consentimiento y el adiestramiento de Estados Unidos, el mismo país que la madrugada del 20 de diciembre de 1989 ejecutó una acción planificada para desmantelarlas y entregar el gobierno al abogado panameño Guillermo Endara”, agregó Lauría.

A la fecha el episodio violento no ha sido esclarecido a detalle y el número de víctimas sigue sin determinarse con contundencia. Distintos cálculos estiman los muertos entre 200 y miles, según información de la iglesia, el Instituto de Medicina Legal, organismos de derechos humanos y el propio invasor, Estados Unidos.

Tampoco se conoce cuántas personas fueron desaparecidas durante la intervención militar, pero el 5 de octubre de 2018 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) responsabilizó a Washington por violar los derechos a la vida, la libertad, la seguridad, la propiedad, la justicia y la integridad de los panameños, además de llamar al país a reparar el daño a nivel material e inmaterial.

La decisión de la administración de Cortizo se inscribe en ese escenario de indeterminación histórica, pero permitirá a los panameños abundar en el ejercicio de memoria en torno al episodio registrado hace 30 años.