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Internacional Latinoamérica


Chile rechaza evaluación de Amnistía Internacional


Publicación:22-11-2019
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Amnistía Internacional pretende establecer que se ha estado aplicando una política deliberada para dañar a los manifestantes

Santiago.- El gobierno de Chile rechazó el informe de Amnistía Internacional que asegura un uso excesivo de la fuerza de Estado contra ciudadanos que ejercen su derecho a la protesta

La subsecretaria de derechos humanos del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, Lorena Recabarren, aseguró en un mensaje desde La Moneda que el gobierno de Sebastián Piñera sólo ha procurado una política de protección, replicada por todas las autoridades.

“Desde que se produjo el estallido social, este compromiso sólo ha crecido”, en atención a los más altos estándares internacionales, en un gobierno que se ha enfocado en modernizar a cuerpos como carabineros en materia de respeto a los derechos humanos.

Con su informe, Amnistía Internacional pretende establecer que se ha estado aplicando una política deliberada para dañar a los manifestantes, a pesar de que no solicitó información al gobierno.

La subsecretaria Recabarren agregó que el gobierno reitera su “absoluto” compromiso con la justicia. “Como lo señaló el presidente de la república, no habrá impunidad”.

Esta mañana Amnistía Internacional aseguró que ha habido un patrón generalizado de parte del Estado en la represión contra los manifestantes, que han expresado su inconformidad con la política económica y social chilena durante las últimas semanas.

Piñera decidió utilizar al ejército contra la población civil pese al trauma social aún vivo de la dictadura de Augusto Pinochet, consideró Amnistía.

Armamento militar se ha utilizado de manera indiscriminada para reprimir la protesta, aseguró en la presentación de conclusiones Pilar San Martín, investigadora para contextos de crisis de Amnistía Internacional para las Américas.

Los disparos de agentes oficiales contra los globos oculares de casi 300 personas son “aberrante” y constatan el uso desproporcionado de la fuerza pública.

Ante este escenario, Amnistía Internacional recomendó al gobierno chileno dejar de reprimir a ciudadanos en el ejercicio libre de sus derechos, y demandó que los órganos de justicia investiguen las responsabilidades de mando en la represión.

Pidió, además, que las demandas de la sociedad chilena sean debidamente atendidas de manera que se garanticen los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales de las personas.

Además, que la policía sea reformada de manera profunda para garantizar que respeten los derechos humanos y cuenten con mecanismos de control y rendición de cuentas.



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