Reino Unido rechaza captura de independentista catalana

Londres.- El Ministerio del Interior de Reino Unido consideró que la euroorden del Tribunal Supremo de España contra la exconsejera de Educación de Cataluña, Clara Ponsatí, “es desproporcionada”, respecto a su legislación, por lo que descartó darle trámite. 

Según informes de la Unidad Oficina Sirene (cooperación policial europea), dependiente el Ministerio del Interior, citada por Europa Press, el juez de la causa de los líderes independentistas, Pablo Llarena, giró el martes una nueva orden de detención y entrega de la exfuncionaria catalana, que se encuentra en Escocia.

En respuesta al Ministerio del Interior de España, el gobierno británico señaló: “la orden de detención europea ha sido revisada por un abogado especializado del Reino Unido en nombre de la Agencia Nacional contra la Delincuencia. Han determinado que es desproporcionado con arreglo a la legislación del Reino Unido”.

Argumentó que la euroorden “no ha sido certificada por el Servicio Nacional SIRENE del Reino Unido y, por el momento no tomarán ninguna otra medida en relación con este asunto”, según el sitio digital europapress.es.

Sin embargo, solicitaron a las autoridades españolas “información sobre el historial delictivo previo” de la exconsejera catalana “o cualquier otra información relativa a la gravedad de la infracción”, a fin de volver a “evaluar la decisión de no certificar esta orden de detención europea”.

Europa Press refirió que en Reino Unido el delito de sedición se relaciona con el orden público por lo que no es un ilícito contra el Estado, como sí se contempla en la legislación española, por lo cual se catalogó como un acto desproporcionado para la entrega de la exfuncionaria de Cataluña.

La citada euroorden también se envió a autoridades judiciales de Escocia, en versión traducida al inglés, según otras fuentes citadas por el reporte del sitio digital eruopapress.es.

Por otra parte, Aamer Anwar, abogado de Ponsatí indicó que ante esta situación, su cliente pospondrá su comparecencia ante la autoridad escocesa y respecto a la orden judicial consideró que contiene “contradicciones”, toda vez que acusa rebelión y sedición, pese a que la exconsejera solo es acusada de sedición.