Huyen de sus comunidades 13 familias por inseguridad

CULIACÁN, Sin.-  Al menos 13 familias de la región serrana de Durango huyeron de sus comunidades, debido a padecen la falta de seguridad y de servicios.
El grupo, formado por 40 adultos y 22 niños, solicitó a elementos de la Policía Estatal Preventiva del estado de Sinaloa que les brindara protección en el traslado de sus comunidades al poblado de Plomosas, localizado en El Rosario.
La zona serrana de Sinaloa que colinda con Durango se encuentra resguardada de manera permanente por elementos de la Policía Estatal Preventiva y personal militar para garantizar la seguridad de los habitantes de la zona.
Joel Ernesto Soto, director de la Policía Estatal Preventiva, dijo que estas familias provienen de las comunidades Los Ángeles, Los Duraznitos y Agua Fría.
Una fuerza mixta de policías estatales y del Ejército las trasladó, con sus pertenencias y mascotas hasta la cabecera municipal El Rosario, donde se les brindó alimentos, alojamiento y asistencia médica. Ahí estuvieron hasta que unidades enviadas por el gobierno de Durango los llevó por vía terrestre hasta la capital de dicha entidad.
Joel Ernesto manifestó que estas 13 familias, en su mayoría niños y niñas, expusieron que decidieron buscar refugio en la capital de su estado, por lo que bajaron por territorio sinaloense.
Comentó que los cuerpos de seguridad y las fuerzas federales trabajan en esa región de forma coordinada, a fin de mantener un resguardo efectivo de la zona fronteriza con el vecino estado de Durango, de donde provienen.
El Ejército destinó el mes pasado más elementos para conformar una nueva base de operaciones, para reforzar la presencia de la Policía Estatal Preventiva, en el municipio El Rosario, donde el viernes pasado, en la comunidad de La Rastra, se registró un enfrentamiento en el que un hombre y una mujer resultaron muertos y un niño herido.
Primer desplazamiento. En abril pasado se registró un nuevo desplazamiento de 84 personas, miembros de 13 familias de las comunidades del Azafrán, Las Negras y La Rastra, las cuales fueron escoltadas por fuerzas federales hasta la cabecera municipal.
A consecuencia de estos hechos, la Policía Estatal Preventiva instaló una base en esa región para prestar auxilio a la población acosada por la delincuencia, y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) envió a un grupo de 30 elementos para fortalecer la seguridad.